jueves, 28 de noviembre de 2013

Origen de la expresión PONER LA MANO EN EL FUEGO.


Sitiando en el 510 a.C. la ciudad de Roma el ejército del rey etrusco Porsena (aliado de Tarquino el Soberbio, que pretendía recuperar el trono de Roma), un joven romano, llamado Cayo Mucio, entró una noche en el campamento enemigo con la intención de asesinar a Porsena, pero por error mató a su escriba. Al ser detenido confesó que, a pesar de haber fracasado, estaba convencido que cualquier joven romano intentaría lo mismo hasta lograrlo, e inmediatamente puso su mano derecha sobre el fuego de un altar y la dejó consumirse sin emitir gemido alguno.

El rey Porsena impresionado ante la valentía del joven y creyendo que se enfrentaba a un pueblo feroz, perdonó la vida del joven y levantó su campamento, abandonando el asedio a la ciudad.
A raíz de este hecho los romanos llamaron a Cayo Mucio con el apodo de “SCAEVOLA” (el zurdo).

Es conocida la anécdota de que siendo Nietzsche estudiante de filología clásica y habiendo declarado un profesor que a su juicio no hubo ni podía haber mártires como Escévola, Niestzsche armó una pira con libros y cuadernos junto a algunos de sus compañeros y expuso su mano al fuego durante varios segundos sufriendo heridas que le duraron varios meses tan sólo para demostrar que su profesor no estaba en lo cierto. 



 

domingo, 27 de octubre de 2013

'Haz el amor y no la guerra' se inventó en la Antigua Grecia.

Nos tenemos que remontar a la Guerra del Peloponeso. Este conflicto bélico entre Esparta y Atenas, en el S. V a.C., sirvió de inspiración al dramaturgo griego Aristófanes, que escribió su famosa Lisístrata.

Esta obra relata un alzamiento de las mujeres, en medio de esta guerra, en el que la propia Lisístrata (heroína de la comedia cuyo nombre significa “la que disuelve ejércitos”) reúne a las mujeres de ambos bandos, comprometiéndose a iniciar una huelga de tipo sexual para que ninguna de ellas tenga relaciones sexuales con su esposo o amante hasta que la guerra haya concluido. Aunque, al principio, la idea no termina de convencerlas (Cleonice, una vecina suya afirma: “...cualquier otra cosa que quieras. Incluso, si hace falta, estoy dispuesta a andar por fuego. Eso antes que …, que no hay nada comparable, Lisístrata, guapa.”), la asamblea de mujeres helenas termina por aceptar las propuestas: abstinencia sexual y toma por parte de las mujeres de la Acrópolis ateniense, lugar donde se guardaba el tesoro de Atenas.

La estrategia de Lisístrata consigue finalmente su objetivo y los hombres, incapaces de aguantar la abstinencia, deciden firmar la paz. El final celebra la felicidad alcanzada: hay una comida de reconciliación entre atenienses y espartanos, se reconcilian también hombres y mujeres y todo concluye entre danzas y cantos.


Juramento inicial (fragmento)

Lisístrata: Lampito, todas las mujeres toquen esta copa, y repitan después de mí: no tendré ninguna relación con mi esposo o mi amante.
Cleónica: No tendré ninguna relación con mi esposo o mi amante.
Lisístrata: Aunque venga a mí en condiciones lamentables.
Cleónica: Aunque venga a mí en condiciones lamentables. (¡Oh Lisístrata, esto me está matando!)
Lisístrata: Permaneceré intocable en mi casa.
Cleónica: Permaneceré intocable en mi casa.
Lisístrata: Con mi más sutil seda azafranada.
Cleónica: Con mi más sutil seda azafranada.
Lisístrata: Y haré que me desee.
Cleónica: Y haré que me desee.
Lisístrata: No me entregaré.
Cleónica: No me entregaré.
Lisístrata: Y si él me obliga.
Cleónica: Y si él me obliga.
Lisístrata: Seré tan fría como el hielo y no le moveré.
Cleónica: Seré tan fría como el hielo y no le moveré.
(...) Lisístrata: ¿Todas han jurado?
Mirrina: Todas.

martes, 6 de agosto de 2013

El billete de 5€ se inspira en el rapto de Europa.


 Europa y el toro (crátera del s.IV, Museo del Louvre)


En la mitología griega, Europa era una mujer fenicia de Tiro que terminaría dando su nombre al continente. La etimología de su nombre (ευρυ- ‘amplio’ + οπ- ‘rostro’) vendría a significar “región extensa, espaciosa”. En el momento en que nace este mito, Europa era Grecia y poco más; las tierras septentrionales, en oposición a las tierras orientales, las del imperio persa, cuyos últimos confines desconocían y a las que daban el nombre genérico de Asia. Detrás de estas denominaciones estaba la división del mundo en dos zonas: aquella donde nacía el sol (Asia), y aquella donde se ponía (Europa). Luego se añadió una tercera región, también ilimitada: Libia, a la que luego llamaron África.

Zeus, prendado de Europa por su belleza, se metamorfoseó en un toro blanco que se tumbó a los pies de la muchacha, mientras ella y sus amigas recogían flores cerca de la playa. Europa acarició al animal y, al notar que era manso, se montó en él; en ese momento el toro corrió hacia el mar y nadó hasta la isla de Creta llevando a Europa en el lomo. Ya en Creta, Zeus reveló su auténtica identidad, y Europa se convirtió en la primera reina de la isla.

Europa dio a Zeus tres hijos: Minos, Sarpedón y Radamantis. A su vez Zeus le otorgó a Europa tres regalos: Talos (un autómata de bronce que vigilaba las costas de Creta), Lélape (un perro que nunca soltaba su presa) y una jabalina que nunca erraba. A su muerte, Europa recibió honores divinos y el toro cuya forma había adoptado Zeus fue colocado entre los signos del Zodiaco y dio nombre a la constelación Tauro.


El nuevo billete de 5€ incorpora en un lateral como marca de agua el rostro de Europa, cuya imagen está sacada de una vasija griega del siglo IV, «Europa y el toro», que forma parte de la colección del Museo del Louvre de París.




sábado, 16 de marzo de 2013

Tiberium in Tiberim!

Hoy, 16 de marzo, en el año 37 muere el emperador Tiberio a la edad de 77 años y tras veinte años de mandato, pero a diferencia de Augusto, su reinado fue apático y sobrio, lo que desató la enemistad del pueblo, que no lloró su muerte. Según nos cuenta Suetonio, el pueblo se alegró y lo festejó con el grito "Tiberium in Tiberim!" ("Tiberio al Tíber!"). Los últimos años de Tiberio fueron de constante paranoia, abandonando el poder a la inercia burocrática de Roma y dejándolo en manos de Sejano, Prefecto del Pretorio, mientras él se refugiaba en su villa de la isla de Capri, con la intención de convertir la isla en el mayor burdel de Roma.
El emperador dejó el trono a Calígula y a Tiberio Gemelo, pero una de las primeras acciones de Calígula fue asesinar a Tiberio Gemelo, al que acusó de conspirar y así hacerse con el poder en solitario. A pesar de que la muerte de Tiberio parece que fue por causas naturales, muchos creen que Calígula tuvo algo que ver. 

  (Busto de Tiberio. Museo Arqueológico de Palermo)

viernes, 22 de febrero de 2013

La dieta espartana



La sopa negra (en griego μέλας ζωμός), era uno de los platos emblemáticos de la dieta espartana, que se consumía durante la “sisitia” (comida colectiva del ejército espartano). Este caldo, ascendido a símbolo de la frugalidad de las costumbres espartanas, tenía un sabor abominable, pero aportaba a sus guerreros valor y coraje tradicional espartano. Se trataba en realidad de un guiso elaborado con carne de cerdo, vinagre, sal e hierbas aromáticas, oscurecido por la adición de sangre y vino. Aunque no se ha conservado receta alguna de este plato, se cree que el vinagre actuaba como emulsificante evitando que la sangre del cerdo se coagulara durante la cocción.

Según la leyenda, un hombre de Sibaris (ciudad del sur de Italia famosa por su lujo y glotonería, de donde deriva el término sibarita) dijo tras probar la sopa negra que entendía por qué los espartanos estaban tan dispuestos a morir en el campo de batalla. Probablemente preferían morir antes que volver a tomarlo.

Plutarco, en la Vida de Licurgo, cuenta que un rey del Ponto, tras haber oído hablar de esta famosa sopa y sintiendo curiosidad, hizo traer a un cocinero espartano para que lo preparase. Al probarlo lo encontró pésimo, a lo que el cocinero contestó que para disfrutarlo plenamente era necesario bañarse primero en el Eurotas (el río del Peloponeso que pasa por Esparta), dando a entender que sólo conociendo las costumbres y tradiciones espartanas, se podía apreciar un plato propio de un estilo de vida simple y esencial.

El mismo Plutarco cuenta que los ancianos espartanos no comían carne (que se dejaba a los jóvenes), prefiriendo alimentarse casi exclusivamente de sopa negra.

viernes, 15 de febrero de 2013

"Hay muchísimos documentos a los que sólo podemos acceder si conocemos el latín"

Entrevista en La Ventana a Marina del Castillo, profesora titular del Departamento de Filología Latina de la Universidad de Granada.

jueves, 14 de febrero de 2013

Origen de la festiviad de san Valentín


En la antigua Roma el día 15 de febrero tenía lugar la fiesta de la Lupercalia en honor del dios Fauno (Pan en la mitología griega) conocido con el sobrenombre de Luperco. En esa festividad se celebraba un ritual de purificación llamado Februa (origen de la palabra "febrero"), durante el cual jóvenes desnudos bailaban suplicando a los dioses fertilidad para sus mujeres y protección contra los lobos. Se sacrificaba un macho cabrío, en la cueva Lupercal, donde supuestamente Rómulo y Remo habían sido amamantados por una loba; terminado el sacrificio los luperci, despellejaban el animal para fabricar látigos con su piel, y se lanzaban a la carrera por el monte Palatino azotando a todo aquel que se cruzaba a su paso... Especialmente a las mujeres, que ofrecían gustosas sus espaldas y nalgas ya que se creía que los azotes propinados por un luperco no sólo purificaban, sino que también aumentaban enormemente la fertilidad.


En el año 494 el Papa Gelasio I, en su afán de eliminar unas fiestas que eran, según su descripción, "crimen público e instrumento de perversión y carnavalesca lujuria", las sustituyó por un día en honor a san Valentín, personaje que había sido martirizado y decapitado por orden del emperador Claudio II en el 270 d.C, por casar a los soldados, habiendo prohibido este emperador el matrimonio de los hombres jóvenes que debían ingresar en el ejército. De este modo se sustituyó una festividad pagana por una cristiana y a partir del siglo XIV se relacionó esta fiesta con el “amor romántico”.




jueves, 24 de enero de 2013

Incitatus, el caballo más rico de la historia




La historia nos recuerda que el caballo de Alejandro Magno se llamaba Bucéfalo, el de Aníbal Strategos, el de Julio César Genitor y que Incitatus (Impetuoso) fue el caballo preferido de Calígula (12-41 d.C.). 

Incitatus era un caballo de carreras que había nacido en Hispania, en una época en que se importaban a Roma cerca de 10.000 equinos cada año; pero la devoción del emperador por su caballo llegó a extremos ridículos, hasta el punto de considerarlo su mejor amigo y con el que podía hablar.

Según el historiador Suetonio, Calígula le hizo consturuir una caballeriza de mármol, con pesebres de marfil; se le concedieron riquezas, una villa con jardines y 18 sirvientes para su cuidado personal; dormía con mantas de color púrpura (el tinte más caro en la Antigua Roma, reservado a la familia imperial) y llevaba collares de piedras preciosas; se le casó con una bella mujer llamada Penélope y, finalmente, Calígula le nombró cónsul de Bitinia en el Senado.

Como caballo de carreras que era, participaba en las competiciones celebradas en el hipódromo de Roma. La noche anterior a una competición, el emperador dormía junto al animal y se decretaba un silencio general, que nadie podía violar en toda la ciudad bajo pena de muerte, con el fin de que el caballo descansase correctamente. Al parecer, Incitatus solo perdió una carrera en su vida, tras la cual Calígula ordenó al verdugo que matase lentamente al auriga para asegurarse de que sufriera.

sábado, 19 de enero de 2013

LA JUBILACIÓN, UN INVENTO ROMANO!!!



Cayo Mario, político y militar romano protagonista clave en los acontecimientos que formaron parte de la convulsa historia de finales de la República, inventó lo que podemos denominar jubilación. Logró promulgar una legislación que otorgaba una serie de beneficios a los soldados que dejaban de servir al ejército. A los 45 años, después de 20 años de servicio, los militares que terminaban el servicio recibían por un lado una pensión de su general y, por otro lado, una porción de tierra en alguna zona conquistada a la que podían retirarse.

En muchas ocasiones se fundaron ciudades para asentar a los veteranos jubilados: Emérita Augusta (fundada por Octavio Augusto al licenciar a las legiones V y X), Itálica (fundada por Escipión para los soldados heridos en la batalla de Ilipa).

lunes, 14 de enero de 2013

LA MÚSICA EN ESPARTA



Los espartanos, además de la guerra, también tenían una gran afición por la música. Dos de los músicos más conocidos de la antigüedad griega eran espartanos: Terpandro y Alcman (s. VII a.C.).
El primero introdujo la música en la enseñanza espartana y añadió tres cuerdas más a la lira, que para entonces contaba con solo 4. Se le atribuye también la invención de los νόμοι ("reglas") para la música. De los seis libros que compuso, se conserva aún su "Partenion", donde dejó escritas las "coreografías" de una serie de danzas corales destinadas a ser bailadas por doncellas.

viernes, 11 de enero de 2013

CAVE CANEM



En el Imperio Romano la figura del perro tuvo diversas funciones. Marco Terencio Varrón, en su libro Rerum rusticarum, clasificó en tres categorías las razas de perro, según su utilidad: para la casa (villatici), para el pastoreo (pastorales), para la caza (venatici), de pelea (canis pugnacis), de rastro (sagaces) y de carrera (celeres).

Como mascota, sólo se lo podían permitir las clases adineradas. El poeta Marcial nos ha dejado la descripción de una perra, llamada Issa, que tenía su amigo Publio: “Issa es más pura que un beso de paloma, más cariñosa que todas las muchachas, más preciosa que las perlas de la India”. Emperadores extravagantes como Domiciano o Caracalla llegaron a tener un león como mascota, en vez de un perro.

En los anfiteatros combatían con poderosos osos, estimulados por la gente, que disfrutaba del derramamiento de sangre.

Durante la conquista de las Galias, Julio César empleó el canis pugnacis, dotado de fuertes músculos y afilados dientes. Otros perros fueron utilizados para enviar mensajes introducidos en un tubo de cobre, que el animal se tragaba; lamentablemente había que matarlos para recuperar el mensaje.

El ejército prefería llevar consigo muchos gatos, por ser considerado un animal victorioso, que era utilizado para eliminar plagas de ratas.

¡Los romanos ya hacían botellón!

El historiador romano Amiano Marcelino, que vivió y relató el proceso de decadencia y descomposición del Imperio romano durante el siglo IV, cuenta en su obra "Historias" que la juventud de entonces se reunía en las plazas y molestaban a los vecinos con el ruido, no dejándoles dormir...

PECUNIA NON OLET

“El dinero no huele”, eso le dijo el emperador romano Vespasiano a su hijo Tito en alusión al impuesto sobre la orina.

Resulta que en el siglo I no toda la plebe romana tenía acceso a la red de alcantarillado de la Cloaca Máxima y por ello usaban unos curiosos baños públicos. Eran recipientes de cerámica repartidos por la ciudad, donde se recogía la orina a la que se le daba una función. Se utilizaba como blanqueante para las togas por su alto nivel de amoniaco.

Vespasiano, como buen político, vio la posibilidad de engrosar las arcas públicas y creó un nuevo impuesto sobre la orina: “Vectigal Urinae”. La idea no fue muy bien acogida y hasta Tito, su hijo, la criticó. Ante esto Vespasiano lo tuvo claro: lo importante es conseguir dinero sin importar su procedencia.
En la actualidad en Italia se conoce como “vespasiani” a los urinarios públicos.


Letrinas públicas de Ostia Antica

BONI PASTORIS ESSE TONDERE PECUS, NON DEGLUBERE

A LAS OVEJAS SE LAS PUEDE ESQUILAR, PERO NO DESPELLEJAR

El emperador Tiberio, sucesor de Augusto, tuvo grandes aciertos en su gobierno, pero también grandes fallos como persona. En su época los tributos a las provincias se exigían con moderación y las leyes se aplicaban con justicia.

Un día, que un gobernador de provincias le envió una suma excesiva fruto de unos impuestos manifiestamente superiores a los presupuestados, Tiberio le destituyó fulminantemente diciendo:

BONI PASTORIS ESSE TONDERE PECUS, NON DEGLUBERE
(Un buen pastor esquila las ovejas, no las despelleja).

Busto del emperador Tiberio